POR MI Y POR TODOS MIS COMPAÑEROS ( CARTOGRAFÍA FINAL)

Al leer el título de este artículo supongo que os habrá venido a la cabeza la mítica frase que todos decíamos al jugar al escondite.  Otros quizá hayáis pensando en el mítico álbum de El canto del loco pero lo que yo he querido es hacer un pequeño homenaje a mis compañeros de clase.

Como ya sabéis yo caí en la trampa de explicar mi recorrido de una forma muy superficial, con los famosos pasos para medir distancias. Sin embargo durante esta semana he evolucionado mi trabajo teniendo en cuenta las distintas aportaciones y matices que observaron los demás alumnos hasta llevarlos a mi terreno y conseguir así una cartografía totalmente personal.

En esta he querido ir más allá del recorrido como tal, enfocándolo como la transición entre el interior: mi casa mi fortaleza, mi morada, y el exterior: la calle. Pero a medida que iba trabajando y más aún tras haber estado durante meses entre estas cuatro paredes, me he dado cuenta de todo lo que significaba salir a la calle. Es por ello por lo que he querido reflejar toda mi " vida " fuera de casa.

Por que no es solo el salir con los amigos a tu bar de siempre sino también los deportes: mi esgrima y mi baloncesto que tanto echo de menos. Son también los viajes, el descubrir una nueva ciudad, un mejor pincho de tortilla, las risas al contar por enésima vez la misma historia de siempre. En resumen todo y todos aquellos con los que convivimos en nuestro día a día y que nos hacen vivir a tope.

Pero aunque parezca abrumador el exterior, no hay que menospreciar el interior, el hogar. 

Aquí he reflejado lo diferentes que son cada uno de los espacios así como la incidencia de la luz, desde la luminosidad del salón gracias a la orientación sur hasta el largo pasillo que se va haciendo cada vez más oscuro. Pero estos espacios no se podrían explicar sin los recuerdos. Cada uno evoca un sonido, una sensación diferente. 

Al escribir estas líneas empiezo a escuchar canciones de Spandau Ballet, Sade Adu, Beatles, Oasis, todos los grupos que han marcado mi infancia y que me siguen encantando. Al mismo tiempo pienso en mi yo de hace unos cuantos años corriendo y gritando disfrazado de los personajes que veía en los películas de cine clásico, en fin 18 años de recuerdos sin los que esta casa no sería la misma.